Ella, pirata

Pienso en la meta de mis pensamientos y no encuentro manera de cambiar mis objetivos, mi visión de futuro, de hacer desaparecer mi desesperación y dolor, de no poder ni rozar lo que tengo al lado.

Es más que sabido que estoy hablando del enramado sexo opuesto, tan solo como un inciso antes de proseguir;mi quebradero de cabeza, el pensamiento que hace que mi ojo suelte una lágrima cuando me despido no es más que una mujer.

Ya lo dijo Tote, No es buena tanta amistad entre hombres y mujeres, tan simple como que en algún momento de la relación (o sino desde el principio) uno de los participantes puede cambiar el prisma de su vista , y así, se suceden una serie de balazos sentimentales sobre el participante confundido.

Estar sentado junto a ella pensando en la belleza de sus mofletes o en la jugosidad de sus labios carnosos , y ni siquiera poder rozarla mas halla que como un amigo; no poder abrazarla las 24 horas del día, no poder sentir la sincronización de los latidos como uno solo, me hace sentir como un desecho mas de los que hay en el bar donde estoy hablando con ella de algo sin sentido para mi, porque para mi solo existe una cosa en la que pensar, ella.

No si considerar este sentimiento como amor, ( odiosa palabra, ¿verdad?), pero no podría decirla que no la quiero sin mentir, decirla que no tengo a nadie en mente sin engañarme y así, una mentira detrás de otra sólo fomenta los sucesivos nudos que se producen en mi estómago.

Necesito llorar y no puedo, quiero desahogarme de alguna manera; tan solo verla recostada en mi brazo y saber que nunca voy a poder cuidarla mientras está enferma o enamorarme de su forma de dormir, hace que me hunda en un charco de fango que me absorbe y me roba mis alientos de esperanza porque algo suceda.

Más dolor que el de mirarla a los ojos y atravesarla con la mirada por saber que el que está hay reflejado no es mas que su amigo (dichoso adjetivo, ¿verdad?), es verla hablado con un baboso que destaca en la fiesta por su larga lista de triunfos amorosos y por haber concluido en numerosas peleas con más sangre en sus nudillo que el cuerpo humano contiene; ésto hace que "la vena" salga a relucir su magnifico aspecto de odio, rabia, celos, desesperación, envidia etc... todo ello resumido en los latidos de mi corazón durante breves segundos, hasta que ella le da largas porque ella vale mucho mas que eso, aunque no se lo crea, ella vale mas que el tesoro de un pirata. Ella, pirata de mi corazón naufragado, navega sin horizonte, en busca de algún destino escondido en su corazón, un hueco para compartir, una cala donde sin naufragar descansemos juntos, no para siempre, pero si para nunca.